Ficha técnica: IMDB Wikipedia
Vistas: 13
Restantes: 988
Días: 29
Vista en: 2009
Lugar: En el DVD de casa (alquilada).
Hoy cambiamos de registro y comentaremos la película que dió el pistoletazo de salida al movimiento "Dogma 95".
Los creadores de este movimiento fueron los directores daneses Lars Von Trier y Thomas Vinterberg que pretendían devolver el cine a sus orígenes librándolo de todo artificio y convirtiendo a la cámara en una mera espectadora de la historia de la película. Nada artificial podía usarse: ni música, ni efectos, ni montaje, ni siquiera se podía usar una grúa para sujetar la cámara que debía sostenerse en la mano. El objetivo era crear un marco en el que los jóvenes realizadores pudieran películas con poco presupuesto y tener repercusión internacional.
Si el movimiento Dogma tuvo alguna validez artística fue con la película de hoy: Celebración de Thomas Vinterberg, cofundador del movimiento. Fue la primera película Dogma y la que mejor supo combinar todos sus elementos con la historia narrada.
Un hombre de negocios celebra su 60 cumpleaños con su familia y amigos en el hotel familiar. Todo va de acuerdo a tan magna ocasión: vino, comida, bailes,... hasta que aparece el hijo menor de la familia y hace una sorprendente revelación...
Ese oscuro secreto familiar es elemento articulador de toda la película. El espectador se ve poco a poco atrapado en el sórdido ambiente familiar de tal forma que las recurrentes escenas festivas se van haciendo más insoportables a medida que avanza la película y se van conociendo más detalles de la turbia historia familiar. A la misma vez, el personaje principal, que al principio cae poco simpático al ser presentado por los demás miembros de la familia como un hombre de mala vida, va ganándose el favor del público y su cruzada se convierte en la cruzada del espectador.
Y la película consigue todo eso con los medios de partida más desfavorables para enganchar: con una cámara temblorosa, con luz natural, sin banda sonora,... Y aún así, funciona hasta tal punto que al final del film uno no concibe otra forma de narrar la película.
Una película ciertamente recomendable. Y un recordatorio de que no hace falta el presupuesto de Avatar para hacer buenas películas.
Sin embargo, no cualquier video casero puede considerarse una película de calidad. Y es este punto en el que falla toda la argumentación Dogma. El bajo presupuesto no simplifica la realización de películas. Al contrario, cualquiera puede hacer una película que atraiga al público si se dispone de grandes medios pero se necesita una clase especial de realizadores para hacer funcionar este tipo de historias mínimas. Y es que a fin de cuentas, seas escritor, cantante o director de cine todo se reduce a saber contar historias y lo demás es lustre.
Men in black: International
Hace 5 años
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